Saturday, July 26, 2014

The old fashion way

    Se me ocurrió venir a Mendoza y decidí hacerlo de la manera más barata posible: micro. Los precios van desde los $540 a los $890, siendo que hay vuelos por menos de $700. De todas maneras encontré un asiento en oferta en un micro de Andesmar cuyo precio regular era de $750 y quedaba a $540, lo compré sin dudar; el siguiente más barato era por Central Argentino a precio regular de $550, sin servicio y con más paradas.

    El micro salió a las 16.45 de la terminal de La Plata, a horario. Se notaba que la unidad era muy nueva, todo estaba muy limpio, los asientos muy cómodos, todo parecía ir bien. Subió a la autopista pero para mi sorpresa tomó la bajada que va a la rotonda de Alpargatas y siguió por ruta 36 pasando por los peores lugares de Florencio Varela (incluído el Barrio Pepsi) a una velocidad que estoy seguro estaba por debajo de la mínima legal. Entró a la terminal de Berazategui, levantó 5 personas, cuyos pasajes combinados no llegan a equiparar el precio de la nafta que se gastó por dar todas esas vueltas innecesarias. A esta altura comenzó a darme un dolor de cabeza inesperado y, por supuesto, las azafatas no están autorizadas a proporcionar ninguna clase de medicamento por más que sea de venta libre. Por suerte (?) la señora que se sentaba a mi lado me ofreció un "Mejoralito" que era todo lo que tenía.
-- Yo los tomo para el corazón -- Me dijo y dudé en aceptar. ¡Lo único que me faltaba era que tuviera un ataque por quedarse sin pastillas!  --Tengo más -- Agregó, me quedé más tranquilo y acepté siendo lo único a lo que podía acceder esperando que aunque sea me alivie un poco.
    El camino siguió por la Calchaquí, pasando por Quilmes entrando a la Capital por el Acceso Sudeste, no sin antes recorrer unos basurales en donde unos chicos jugaban al fútbol y no dudaron en usar el micro de frontón para unos pelotazos mientras circulaba a bajísima velocidad.
Llegamos a Retiro a las 19.10 (sí, sí, 2 horas y 25 minutos después de haber salido de La Plata), subió bastante gente pero la odisea no terminó allí, hubo 3 (tres!) paradas más por suburbios conurbanenses, todos incluyendo paseos panorámicos con lo mejor de la precarización en cuanto a la construcción de viviendas.
El asunto principal de esta entrada de blog es que desde que salimos de La Plata y hasta que pusieron la película (ya en ruta, unas 4 horas después) sonó toda clase de música electrónica repetitiva por los parlantes de la unidad. Sentía mi cabeza dentro de un Pinball, siendo la pelotita, claro está.
    Acá es donde me gustaría poner el acento; es cierto que yo estaba con jaqueca y que de esa manera cualquier mínima molestia se transformaba en una tortura, pero me intriga entender el razonamiento empresarial. En un micro con unos (digamos) 80 pasajeros de distintos grupos socioculturales, etarios y, como es de esperarse, de gustos musicales muy disímiles deciden sin más musicalizar el viaje a un volumen superior  al esperable. Intenté ponerme mis auriculares y escuchar mi música, pero los pitidos repetitivos de esas orquestas de timbres asinfónicos no podían ser disimulados con melodías que dudo, ya no que gustaran a todos, sino al menos a una pequeña mayoría. Esto, sumado a la potencia de las luces de LED, hicieron que cerrar los ojos tuviera un efecto nulo al intentar mitigar que el brillo se clave como puñal en mis córneas y mi viaje fuera un calvario de 17 horas y media cuando debería, al menos, haber sido de de sólo 16 porque además llegó tarde a destino.

Señores de Andesmar, qué les parece si...:
En lugar de tener un viaje diario de La Plata a Mendoza sacaran uno día por medio, llenando el micro para no tener que hacer 200 paradas en otros lugares?

En lugar de poner música estridente e irritante pensaran en algo más "easy going" o neutro; música clásica, baladas o hasta "música de ascensor"? Tampoco me quejaría si no pusieran nada.

Lo positivo:
Quiero destacar la vigencia del clásico "Bingo Andesmar" que siempre logra descontracturar el viaje y hacerlo un poco más ameno aunque el premio sea un vino berreta de supermercado. Me encanta que mantengan esa tradición, aunque podrían hacer los cartones un poco más blandos para poder marcar mejor los números.

Tuesday, February 25, 2014

Pizza de brócoli (la masa)

La receta original era con coliflor, pero son más difíciles de conseguir. Pueden probar esta receta que es la que yo hice o esperar a que le haga algunas modificaciones que tengo pensabas y ya subiré al blog.


INGREDIENTES
  • 2 plantitas de brócoli.
  • 250gr de mozzarella (o algún queso mantecoso) y un poco más para “rallar” sobre la masa.
  • 1 Limón
  • 1 Huevo.
  • 1 taza de Tomates deshidratados (o frescos)
  • Aceite, sal, vinagre, pimienta, orégano.
  • Aceitunas, hojas de Albahaca, o lo que quieras poner sobre la pizza.



PREPARACIÓN
Hidratar los tomates deshidratados en agua hirviendo.
Lavar bien el brócoli y cortarlo por los tallos.
Procesar los tallos y luego las puntas, tiene que ser con procesadora, no con minipimer ni licuadora porque no queremos que se haga una pasta, sino como un granulado.
Calentar un chorrito de aceite en una sartén y cocer el granulado de brócoli, teniendo cuidado de moverlo para que no se queme. Una vez cocido, dejar enfriar.
Pelar el limón completamente, quitándole incluso la parte blanca, cortar en círculos y descartar las nervaduras y semillas para luego exprimir sobre un colador y guardar la pulpa a parte.
Cortar los tomates y aceitunas.
Unir el brócoli con el jugo del limón, el huevo y el queso. Salpimentar a gusto.
Aceitar una bandeja para horno o tartera y al colocar la masa, aplastarla hasta que se haga compacta.
Ponerla al horno caliente (unos 180°C ) hasta que se dore, va a tomar alrededor de 15 a 20 minutos.
Sacar del horno, agregar sobre la masa la pulpa de limón, el tomate y las aceitunas, esparcir orégano y el resto del queso y dejar en el horno hasta que se gratine.
Esparcir pedacitos de hojas de albahaca y servir.

Sunday, February 16, 2014

Pizza sin gluten

Porque no es necesario ser celíaco para comer sin gluten. La idea es probar algo diferente a lo que estamos acostumbrados y ver qué onda.
 


INGREDIENTES (para una pizza)

75gr de fecula de maiz
75gr de harina de arroz
75gr de fecula de mandioca
30 gr leche en polvo,
3 gr goma xántica (yo no usé este ingrediente porque no lo conseguí y quedó bien igual)
3gr sal
3gr azúzar
25 gr levadura fresca,
200cc agua tibia
[salsa, queso y todo lo que le quieras poner a la pizza]



Calentar el horno a temperatura media.
Batir todos los ingredientes, puede ser con batidora, licuadora o minipimer, la consistencia que logra es bastante líquida pero rara, ya van a ver.
Colocar en un recipiente aceitado y enharinado (con la harina de arroz), dejarla reposar unos minutos y luego introducir al horno por unos 20 minutos.
Al sacarla va a tener el aspecto de una ostia gigante, pincelarla con la salsa (la que más te guste) y de vuelta al horno por 10 minutos más.
Ahora ya se le puede agregar todo lo que uno quiera para una pizza, yo la hcie de queso y hongos, como se ve en la foto.
Prestar atención al volver a introducir la pizza al horno, ya que lo único que queremos es que se derrita el queso, se puede hacer con el horno apagado o muy bajito.

Espero que la disfruten!

Saturday, February 08, 2014

Brownies veganos de porotos negros

La idea es que las recetas que postee en este blog hayan sido probadas por mi antes, no es sólo una recopilación, sino ensayo y error.
El otro día me topé con una receta interesante de brownies veganos de porotos negros, aproveché que era el cumpleaños de mi amiga vegana y me puse manos a la obra. Honestamente mis expectativas no eran demasiado altas pero quise hacer la prueba de todos modos y no me arrepentí, salieron sorprendentemente exquisitos!




INGREDIENTES:
Porotos negros: 3/4 de taza
Avena molida gruesa 1/2 taza
Azúcar 2/3 de taza
Aceite 1/2 taza
Esencia de vainilla 2 cucharaditas
Sal 1/4 de cucharadita
Polvo de hornear 2 cucharaditas
Cacao amargo 3/4 de taza
Nueces 1/2 taza
Cáscaras de naranja 1/2 taza (si son almibaradas, mejor)


 

PREPARACIÓN:
Dejar remojar los porotos por al menos 6 horas, luego hervirlos hasta que estén bien tiernos (unos 25/30 minutos).

Una vez hervidos, procesarlos junto con el azúcar, el agua y el aceite hasta que quede una pasta más o menos homogénea.
(En este momento es una buena idea encender el horno para que se vaya calentando).
Pasar la preparación a otro recipiente, agregar el resto de los ingredientes e ir mezclando; avena, cacao, esencia de vainilla, sal, polvo de hornear, nueces y cáscaras de naranja. (Personalmente no me gustó como quedó con las naranjas, son un poco chiclosas al morder el brownie, no les volvería a poner)
Cuando ya está todo bien mezclado pasarlo a un recipiente aceitado y enharinado y poner al horno.
Lleva alrededor de 20 minutos a horno medio, lo ideal es probar pinchando con un cuchillo en el medio y que salga un poco húmedo.